jueves, 30 de enero de 2020

Salvaje

Estilo: Japonés
Sabor: 8.5
Servicio: 8
Ambiente: 9
Precios fuertes: $30.000 - $210.000
Relación costo - beneficio: 5
Dirección: Calle 83 # 9 - 48

Llega este negocio como franquicia internacional a Bogotá, creo que provenientes de Panamá. El ambiente es bastante agradable, si bien el sitio es bastante oscuro, está muy bien iluminado y decorado, generando la sensación de un restaurante que pudiera estar ubicado por ejemplo en la gran manzana. Al fondo, tiene una barra donde preparan los rollos de sushi. La carta se divide en rolls, nigiris, entradas o platos para compartir, sopas y arroces, ensaladas, robata parrilla japonesa) y postres.
Ese día las mesas estaban llenas, así que nos sentamos en la barra. El mesero sugiere una serie de platos, indicando que el concepto está centrado en compartir. Ordenamos un roll, un arroz con pato, unos buns con short rib y unos camarones tempura. Vamos primero con lo positivo, buenos sabores, se nota que se esmeran en conseguir sabores e ingredientes especiales y aplicar algunas técnicas de cocina moderna. Lo negativo, las porciones son pequeñas y al final toca pedir muchas cosas para salir satisfecho, elevando la cuenta a cifras escandalosas; tampoco me gustó mucho la insistencia del mesero en que pidiéramos más platos y que en la carta, por ejemplo, en los buns y los rolls, no dice cuantas piezas incluye. En el caso del roll eran solo 5 piezas y nosotros éramos 3 personas. En el caso de los buns eran dos unidades y tocó pedir una unidad adicional. El roll rondaba los 35.000 pesos y los buns también. Los buns tenían poca carne, el arroz tenía poco pato en trocitos. Lo más balanceado fueron los camarones. Al final cuando trajeron la cuenta nos llevamos la sorpresa más salvaje, al ver que el IVA no está incluido en los platos y no cobran el 8% sin no el 19%, lo cual no se advierte en la carta y es una rareza en un restaurante en Bogotá, a eso súmenle la propina 10%. Al final es un 30% más en la cuenta. Teniendo en cuenta que quedé con algo de hambre, la relación beneficio costo no es buena. Si bien, valoro las técnicas y el uso de ingredientes de primera, hay otras opciones a este nivel de precios donde son generosos en las cantidades y queda uno satisfecho. Esto me hace desistir de una segunda vez.


miércoles, 22 de enero de 2020

Crepes Arte-Sano

Estilo: Crepes y helados
Sabor: 9
Servicio: 9
Ambiente: 8.5
Precios fuertes: $12.000 - $25.000
Relación beneficio - costo: 10
Dirección: Calle 109 # 15 - 66

Este es el segundo local de Crepes & waffles que incursiona en este concepto un poco más saludable, con más opciones para vegetarianos, una carta que conserva algunos de los crepes tradicionales con nuevas creaciones y bases de crepes sin harina de trigo y coloridos con esencia de espinaca, cúrcuma y remolacha, el uso de germinados, quinua, entre otros. De la misma manera, cuenta con sabores de helado a base de leche de coco y almendras aptos para veganos. El local es grande, la decoración, completamente diferente a los Crepes tradicionales, más minimalista, mayor espacio entre mesas. Cuentan con un molino de trigo antiguo espectacular, el cual tienen exhibido con toda su historia, siendo uno de los pocos en su estilo en el país. Los precios siguen siendo muy favorables y la calidad se mantiene. haciendo de este local un concepto más creativo.

viernes, 7 de junio de 2019

Tacos MX


Estilo: Mexicano
Sabor: 8
Servicio: 8
Ambiente: 8
Precios fuertes: $15.000 - $35.000
Dirección: C.C Parque la Colina

Esta es la última propuesta del grupo Takami, quienes ya cuentan con tres marcas de comida mexicana, incluyendo Cantina y punto y Sipote burrito. Este nuevo lugar concepto es un punto intermedio entre la formalidad de Cantina y punto y la modalidad de comida rápida de Sipote Burrito, siendo este un restaurante casual.  El local está ubicado en el área Social, donde hay una gran variedad de restaurantes. El área es bastante grande con buena cantidad de mesas. El ambiente a pesar de ser muy concurrido, no se siente sofocante o demasiado ruidoso. La carta de comida está impresa sobre los individuales de papel. Cuentan con algunos antojitos para picar, huaraches, que son tostadas de maíz en forma ovalada, semejando una sandalia con diferentes toppings, la parte central, que son los tacos, los cuales venden por dos o tres unidades, unos pocos platos más formales y hasta tortas (sandeces en Mexico). En principio tocó esperar un poco por mesa, ya que el restaurante estaba lleno. Una vez sentados, la comida llegó rápido a la mesa. Probamos la panceta, los huaraches, tacos, esquites y unas alitas de pollo. La panceta es un bloque de la panza del cerdo cocido lentamente por horas y luego freído para que quede crujiente; muy buena la calidad, totalmente magra con una capa superior de piel crujiente, acompañado con cebolla encurtida, salsa verde y tortillas de maíz. Adicionalmente colocan en la mesa tres tarros con diferentes salsas de ají, todas muy bien logradas y con un nivel de picante moderado. Quiero hacer una mención especial alas alitas de pollo bañadas en salsa de chipotle, simplemente espectaculares!. Al final, la relación beneficio costo me parece muy positiva y se nota que tiene estándares de calidad altos dignos del grupo Takami. Actualización Agosto 2019: Una nueva visita debido a la buena impresión de la primera vez. para esta oportunidad repetimos las alitas de pollo, y siguen siendo espectaculares, el apanado es perfecto, la salsa ahumada de chiles también lo es, quizá lo único es que las alas tienen por carne, ya que realmente son dos colombinas y dos puntas de ala pequeñas. Probamos un queso fundido en cacerola con champiñones, también muy rico, y luego compartimos cuatro porciones diferentes de tres tacos  cada una. Dos de cerdo, una de res y otra de pescado apanado. Unos más sabrosos que otros, en lo personal, mi favorito, el pastor. Algo a mejorar, el sabor y sobretodo la humedad de las tortillas, ya que a medida que se enfrían, se sienten bastante secas. Las porciones son pequeñas, así que no esperen quedar llenos con tres taquitos. De cortesía por motivo de cumpleaños recibimos un  arroz con leche sopleteado. Fue la peor parte e la experiencia, ya que el arroz se percibía seco en su interior como si fuera un arroz viejo y era molesto al comer, la salsa del arroz no era particularmente gustosa. Mi balance fue que empezamos muy bien con las entradas, continuamos bien con los tacos y terminamos mal con el postre. 

viernes, 24 de mayo de 2019

KO Asian Kitchen

Estilo: Asiático
Sabor: 7.5
Ambiente: 8.5
Servicio: 8
Precios fuertes: $25.000 - $40.000
Dirección: Calle 93A - 12 - 35

EL grupo restaurantero MCK llegó a Bogotá en el 2106 con la introducción de su restaurante insignia Osaka, recientemente reseñado en la guillotina. A la fecha cuentan con 4 o 5 conceptos y marcas. Su segunda exportación  Colombia es KO, un concepto informal de cocina asiática que viene a competirle directamente a restaurantes como Wok y Osaki. El local está ubicado sobre el parque de la 93 en el costado sur donde antiguamente quedaba un parqueadero descubierto y ahora han levantado una torre de oficinas muy moderna con un primer y segundo piso de restaurantes y un semi sótano de comidas rápidas. KO se encuentra en el primer piso y es un local bastante grande. Cuenta con una terraza también muy amplia. Apenas entramos, se perciben mucho los aromas a especias orientales. El lugar vive lleno ya que la gente tiene curiosidad de probar el sitio nuevo, así que generalmente hay lista de espera. Nosotros esperamos aproximadamente media hora para tener mesa y fuimos ubicados en la terraza. La carta tiene varias partes, empezando con platos para picar, ensaladas, sopas y mas adelante los fuertes. El mesero hace énfasis en que el concepto del restaurante son platos para compartir. Decidimos probar el tikka masala, el bibimbap y una sopa con wontones de pollo. Los jugos nos parecieron bien logrados con mezclas muy interesantes y balanceadas. En cuanto a los fuertes, empezando por el tikka masala , es una versión diferente a la original, ya que esta son trozos de pollo broaster con la salsa aparte, acompañados con arroz, pan naan con mantequilla y pepino con yogur. No me gustó mucho la presentación del pollo en una bandeja de acero inoxidable y me parece que tener pan y arroz es un poco redundante en cuanto a harinas se refiere. La salsa o curry del pollo le faltaba algo para ser mas contundente y no pica supongo porque la mayoría de colombianos son flojos para el ají. La sopa era de fondo claro, tenía buen sabor, pero los wontones de pollo parecían algo artificiales en su sabor, como si fueran industriales y de textura muy compacta. Por último el bibimbap plato coreano que consiste en una cama de arroz en olla de piedra caliente y encima tiene diferentes acompañamientos de verduras, carne e incluso un huevo frito para mezclar y reventar su yema, es un plato muy divertido y vistoso pero termina volviéndose monótono y algo empalagoso, ya que al final me sobró aproximadamente el 30% del arroz mezclado con una pasta de curry rojo, así que sirvan menos arroz. Otro punto a mejorar sería cambiar el corte de carne ya que son trocitos de algún corte de res ablandado a la fuerza, lo cual se nota en su textura al masticarla, quedaría mejor un lomo de res, ya que es una porción de carne pequeña y el precio del plato está alrededor de los 35 mil. Al final podría ser un plato más balanceado. Los meseros se notaban algo agitados, ya que el sitio mantiene se mantiene a tope. Los precios son del orden de Osaki y un 10% más costoso que  Wok aproximadamente. El ambiente me parece más agradable adentro por la decoración y el mobiliario, sin embargo es bastante ruidoso. En general me parece interesante que lleguen nuevas propuestas y amplíen el abanico de opciones en la ciudad. La comida no está mal pero tampoco enamora.

lunes, 6 de mayo de 2019

Osaka

Estilo: Nikkei
Sabor: 9
Servicio:8
Ambiente: 10
Precios fuertes: $50.000 - $60.000
Dirección: Cr. 13 # 85 - 25


Este restaurante cuenta con varias sucursales en suramérica presenta el estilo japonés peruano, combinación muy especial en donde se mezcla el miso y el wasabi con el ají amarillo y el maíz. El ambiente y decoración del sitio es espectacular, decorado con muy buen gusto. La carta es extensa y tiene varias secciones desde ceviches y tirados de entrada, pasando por sushi y parrilla al carbón japonesa y algunos fuertes. Desde el inicio tenemos una cortesía de un pequeño trozo de salmón seco con mayonesa de maracuya. Muy rico y muy pequeño. Luego nos pasan toallas húmedas calientes con aroma a menta para limpiar las manos. De entrada pedimos un maki de pulpo y langostino. Venían 6 bocados de buen sabor, quizá la base del rollo un poco seca. Hago mención especial a las salsas de todos los platos, las cuales son magistralmente logradas. Los fuertes eran un tazón de arroz frito como cama de una pierna de pato con una salsa de curaba muy rica. Quizá a l pato le falto un toque de crocancia en la piel y más cantidad. El segundo plato fueron unas costillas de cerdo bañadas con ají panca, miso y ajonjolí. muy buen sabor, el acompañamiento eran hojas de lechuga con una vinagreta. El tercer plato era un salmón a la parrilla, de nuevo con un mini acompañamiento, destacable la suavidad del salmón. En general los sabores son excelentes, el pero es que quedamos un poco con hambre, ya que las porciones son muy medidas y los acompañamientos muy light. Fue necesario pedir una porción de arroz adicional. Si consideramos los precios, serían mi única queja, comparado por ejemplo con Remo, que es un restaurante del mismo nivel de precios pero más generoso en sus porciones.Un detalle fue que los meseros olvidaron preguntarnos como nos pareció todo.

jueves, 2 de mayo de 2019

Lima 1850

Estilo: Peruano
Sabor: 8
Ambiente: 7
Servicio: 8
Precios fuertes: $30.000 - $50.000
Dirección: Cr 5 # 119-11


Otro restaurante peruano en la lista que es larga en Bogotá. Ubicado en una casa antigua sobre la Cr. quinta. Es una casa pequeña con tres pisos, algo incómoda en cuanto a distribución, empezando con la cocina con la cual casi te estrellas al entrar y tienes que pasar para acceder al segundo piso. las escaleras son estrechas, los espacios limitados. Los dos primeros pisos estaban prácticamente vacíos. El tercer piso tenía afluencia, ya que es como una especie de terraza cubierta y tiene algo de vista a los cerros. La carta es amplia, con buena variedad de entradas, fuertes y uno que otro postre. probamos el lomo saltado, el seco de cabrito y un arroz chafa con mariscos. la presentación de los platos es buena, las porciones generosas, los sabores si tienen el toque peruano. Puntos negativos, el arroz blanco de acompañamiento para el seco y el lomo, estaba pegajoso, sin sabor y le faltaba cocción en el centro a la vez. El cabrito tenía un fuerte almizcle y el lomo saltado le faltaba estar un poco más sellado. Puntos positivos, la suavidad de las carnes, los sabores de las salsas, la presentación de los platos, la crocancia y suavidad de las papas, plátanos y yucas. No probamos los postres. me parecieron excesivamente caros superando los 20 mil pesos. En general los empleados están pendientes del cliente, y cuando reclamamos el tema del arroz, lo cambiaron, aunque intentaron mejorarlo, era complicado por la misma calidad del grano. los precios están a nivel de restaurantes de gran infraestructura a pesar de estar en un local bastante sencillo en cuanto a adecuación. Creo que detrás de la cocina hay alguien que si sabe de cocina peruana, me complace apoyar opciones nuevas independientes diferentes a los grandes emporios restauranteros, obviamente hay detalles por mejorar pero es un buen intento.

martes, 9 de abril de 2019

Gitane

Estilo: Mediterráneo
Sabor: 8.5
Ambiente: 8
Servicio: 8.5
Precios fuertes: $30.000 - $70.000
Dirección: Cll. 83 # 9-

El último lanzamiento de colección de DLK. ubicado donde quedaba antiguamente Mr. Ribs. Han aprovechado los espacios que ya existían. Este es un local bastante grande, tiene sin embargo un defecto y es que su cocina queda en el subsuelo, así que para los empleados  requiere de mayor dificultad para subir los platos al salón, ya que cuenta con las escaleras algo empinadas, adicionalmente, abajo también se encuentran los baños y realmente es un espacio poco agradable, desordenado y confuso sin mayor indicación donde hay que pasar al lado de la cocina que no tiene diseño pensado para ser visualizada por el público. Realmente está área a los ojos de los clientes es un punto negativo para el restaurante. Pasado este punto, el salón arriba es agradable, cuenta con una barra que estaba desde tiempos antiguos. La carta cuenta con entradas como antipasto árabe, albóndigas de cordero, crema de rugula y alcachofas, entre otros. También encontramos pizzas, las cuales son rectangulares, bowls, pastas, fuertes y postres. Podríamos decir que los sabores abarcan Italia, Grecia y algo de medio oriente. Probamos la sopa de alcachofa, el bowl de pollo, el de lomo y un linguine con mejillones y langostinos. La presentación de los platos es buena, los sabores también, los bowls son platos divertidos, ya que cuentan con variados elementos en su composición. por ejemplo, el bowl de lomo a la parrilla, viene con unas lentejas fritas, batata frita, hojas de  espinaca, queso feta y una especie de guacamole, que fue el único elemento que le sobró al plato, aparte que estaba bastante frío como sacado de nevera. por lo demás mu buena combinación de sabores y texturas. La pasta tenía un sabor espectacular a fondo marino, estaba al dente, era pasta fresca y muy bien presentada. De poste probamos los duraznos asados con helado de yogurt. Estaba apenas bien, el helado rico pero poquito distribuido en tres mini bolitas y los duraznos me hubieran gustado más jugosos. La salsa de fondo estaba rica, algo empalagosa, el precio del postre muy alto ($18.000). En términos generales, se nota que hay buena escuela detrás de las preparaciones y aunque los precios son altos, se sale satisfecho. las porciones son buenas. los restaurantes de DLK tienen un buen estándar en general.

lunes, 1 de abril de 2019

Vitto


Estilo: Italiano
Sabor: 8
Servicio: 8.5
Ambiente: 8
Precios fuertes: $30.000 - $50.000
Dirección: Cll 69 # 4-97

Restaurante en honor al Padrino!!!! Una propuesta que no pertenece a ninguno de los dos grandes grupos restauranteros en Bogotá. Sin embargo este no es el único negocio que poseen, ya que cuentan con otros tres o 4 negocios, todos relacionados de alguna forma con la comida italiana. El restaurante se encuentra justo antes de la subida sobre la cr. 5 y tiene un area tipo jardín a la entrada con varias mesas y el área interior. Nos sentamos adentro en una mesa que daba contigua a la puerta del baño y miraba a una pequeña ventana donde lavaban la loza. Quizá no era la mejor ubicación. Si hace buen clima recomiendo la terraza exterior que tiene mucho verde, aunque da contra la cr. 5. La carta es amplia y va desde entradas como carpaccios, sopa de tomates y calamares apanados, pasando por ensaladas, pastas, pizzas en horno de leña, carnes y pescados y postres. De cortesía recibimos unos trozos de focaccia con oliva y balsámico. El pan era de buena calidad, solo nos hubiera gustado que lo calentaran un poco. Los fuertes elegidos fueron una pasta corta con salsa napolitana y albóndigas de carne y ricotta, la pancita de cerdo con ragú, champiñones, papines y ensalada y el asado de tira sobre vegetales y puré de maíz y papa. Probamos una limonada frapeada que fue una decepción total, ojo que en ealgo tan sencillo, no se puede descuidar, era casi que un témpano de hielo con poco limón, totalmente aguada y sin azúcar. Algo positivo fue que al reclamar nos cambiaron la limonada por una de mejor calidad. Ahora vamos con los fuertes: la pasta corta en buen punto, excelente sabor de su salsa comodoro, las albóndigas con un defecto, estaban algo duras, aunque de buen sabor. La pancita estaba tierna, magra y con una costra crujiente en la superficie, la salsa rica aunque le faltaba algo de fuerza, las pepitas y hongos bien. La ensalada aparte muy fresca, buenos verdes, aliño y tomaticos de colores!. Un plato muy completo. El sabor de la pancita estaba bueno, aunque he probado mejores. El asado de tira bien generoso, tierno, sabor a sobrebarriga, falto algo más de asado, se sentía más sudado, buenos vegetales y puré correcto. En términos generales es una alternativa decente a otros restaurantes italianos, con algunos platos diferentes a los típicos platos italianos que encontramos en la mayoría de los restaurantes.

lunes, 11 de marzo de 2019

Nemo

Estilo: Internacional
Sabor: 9
Servicio: 9
Ambiente: 9
Precios fuertes: $40.000 - $80.000
Dirección: Cr 13 # 85-46

La última creación de Harry Sasson, ubicado en el Four Seasons, este lugar es un homenaje a su padre fallecido Nessim y a la cocina casera. El local es bastante amplio y moderno, está totalmente restaurado. La cocina de tipo abierta, una gran barra, sala privada, una terraza posterior cubierta y un menú con tendencia mediterránea, cuenta con carnes a la parrilla, arroces, sopas, combinaciones con pescado y algunas entradas diversas desde coctel de langostinos hasta tacos. Para comenzar recibimos la cortesía de panda costra gruesa tipo mini baguette con crema agria batida y verduras encurtidas, estuvo bien, sin ser memorable. De fuertes pedimos la hamburguesa de la casa, un arroz meloso con pescado y un lomo de res. Los acompañamientos los venden aparte. El tiempo de espera fue prudente. Primero quiero decir que las porciones son muy generosas. La hamburguesa tenía una buena calidad percibida en su composición cárnica, quizá mezcla un corte de tercera con uno de primera tipo bife ancho o punta de anca, lo cual está muy bien, esto genera buen sabor y textura. El pan de la hamburguesa aunque bueno, he probado mejores como por ejemplo el de Cosette. El termino ¾ era correcto, aunque tendía a perder un poco su jugosidad con el pasar de los minutos, pero nunca llegó a ser pastosa o seca. los aderezos, salsa de tomate, una buena mostaza, queso tipo americano, las verduras clásicas con pepinillos y una ensalada cole slaw. Suficiente y no me hicieron falta las papas, las cuales tocaba pedir por aparte con costo adicional. El lomo de res, tenía buena maduración y jugosidad, sabor parrillero y venía con un tomate a la parrilla. Se pidió una adición de plátanos maduros, que estaba  ok; creo que los acompañamientos alcanzan para dos personas, lo cual tiene su desventaja si solamente lo va a comer una persona. Yo personalmente reduciría la porción y el precio, de manera que si cada uno de los comensales quiere un acompañamiento diferente no se desperdicie nada. El arroz meloso estaba espectacular, de muy buen sabor, super cremoso, el pescado muy tierno, igualmente generoso. Los meseros siempre muy atentos y formales. Al final fue una experiencia muy agradable, donde se nota ese esfuerzo extra por brindar una buena experiencia y un producto de calidad lo cual justifica en parte el alto costo de los platos, aunque definitivamente es uno de los más costosos de la ciudad por lo cual no es para ir cada ocho días, sin embargo me parece que tiene mejor nivel que restaurantes del emporio Rausch, Leo Katz o Andrei, comparando por nivel de precios similares.



viernes, 18 de enero de 2019

Love Chicharrón

Estilo: Chicharrón
Sabor: 7.5
Servicio: 8
Ambiente: 7.5
Precios: $15.000 - $25.000
Dirección: Cll 119 #13 - 08


Un sitio de comida rápida cuyo concepto se basa en el uso del cerdo en sus platos, especialmente en el chicharrón carnudo frito, tan apreciado popularmente en la bandeja paisa en Colombia y otros platos de la gastronomía colombiana. En este caso, lo encontramos en trozos en presentación de conos o en sandeces, con el uso también de costillas de cerdo. Unas cuantas entradas para picar que incluyen empanadas y carimañolas. Yo probé el cono de papel con chicharrones y
salsa búfalo picante. Relación cantidad precio me pareció buena. La textura del chicharrón era crocante y se dejaba comer incluido el cuero, sin llegar a ser cauchudo. La salsa tenía el sabor clásico búfalo y venía impregnado en los trozos de chicharrón, también enco . ntramos mini papas criollas dentro del cono, no muchas. Mi opinión es que faltaron más papas y calvez menos chicharrón, porque hubo un punto en que se volvió monótono y no pude acabar de comer todo el contenido, aparte percibí un poco el sabor del bicarbonato que quizá usen para tiernizar el chicharrón. Creo que estos conos son mejor para compartir entre dos personas. El servicio fue rápido, el pedido se reclama con la ficha electronica en el mostrador. Quizá vuelva para probar el sanduche de costilla con salsa Jack Daniels a ver que tal.

martes, 2 de octubre de 2018

Zatar

Estilo: Arabe
Sabor: 8.5
Ambiente: 8
Servicio: 8
Precios fuertes: $25.000 - $45.000
Dirección: Calle 85 # 19 - 50

Este restaurante abrió su primera sede en la zona G, hace algunos años. Ahora cuenta con esta nueva sucursal. Con una decoración sencilla y sin mayor pretensión, Zatar ofrece los platos más tradicionales de la cocina libanesa. La carta es algo austera en su presentación y se divide en entradas, platos fuertes y pitas y wraps. Las entradas o mezzes como son llamados por los árabes constituyen a su vez el componente principal de los fuertes, como en el caso de las picadas para dos, la cual trae un poco de todo y es una buena muestra de lo que ofrece el restaurante. La verdad es que no defrauda. Todos los componentes de la picada estaban a la altura. Taboule fresco y bien balanceado, kibbes y falafel bien fritos y de buena textura, cremas de garbanzos y berenjenas sin grumos y rollos de uva y repollo fragantes y especiados. El pan árabe tostado y especiado. Como complemento, probamos el arroz con pollo y almendras, el cual llevaba una generosa cantidad de cebolla frita encima. A pesar de no tener una infraestructura opulenta de adecuación, el local es agradable. El tiempo de servicio fue corto y la música aunque no árabe era agradable. Quizá la decoración podría ser algo más alusiva a medio oriente. esta es una buena alternativa para los fanáticos del género, diferente a M Cocina árabe o al Arabe.


miércoles, 5 de septiembre de 2018

M Cocina Arabe

Estilo: Arabe
Sabor: 8
Ambiente: 9
Servicio: 9
Presentación: 8.5
Precios fuertes: $25.000 - $45.000
Dirección: Cr. 7a # 67 - 39

Impulsada por su hermana, Mónica decidió seguir los mismos pasos de su hermana Leo y enfocarse en la cocina Libanesa típica costeña de su zona de origen del caribe colombiano. Todos lo clásicos conocidos como el hummus, arroz con lentejas, kibes, falafel, entre otros los encuentran aquí. La ejecución es buena, la presentación correcta, las cantidades muy generosas y el precio justo. En especial recomiendo los kibes fritos, muy crocantes por fuera y suaves por dentro, de los mejores que he comido de lo que recuerdo. El labne era de buena calidad, las cebollas del arroz con lentejas crocantes, quizá más lenteja que arroz y algo compacto. Los rollos de nafta con un sabor espaciado y salado intenso, el tabule bien equilibrado y fresco. El local es un poco oscuro pero tiene buen ambiente. La música es árabe de fondo, lo cual va acorde a la comida. Apenas uno entra al salón, se siente un olor concentrado arroz con lentejas y especias de medio oriente. El mesero muy amable, inclusive tiene espacio para el humor. me pareció muy curioso que en la parte del bar hay una pantalla pasando constantemente la foto de la presentación de los platos, lo cual ayuda mucho en la elección para conocimiento de los mismos. En fin, una buena opción para degustar este tipo de comida.


lunes, 3 de septiembre de 2018

Seratta Gourmand market

Estilo: Fusión mediterranea colombiana
Sabor: 6
Ambiente: 9.5
Servicio: 9
Presentación: 8
Precios fuertes: $25.000 - $80.000
Dirección: Autopista Norte # 114 - 44

Este sitio parece uno de esos sitios ocultos en la ciudad que es todo un mundo paralelo cuando lo descubres. Es un sitio extravagante de por si, sea por sus más de 1000 m2 o por sus 14 ambientes que incluyen galería de arte con obras para la venta de Negret o su cava con 800 referencias de vino con precios de botella de hasta 8 millones de pesos. El arrea del salón comedor es muy agradable en cuanto a decoración. Como íbamos casi 10 personas, nos reservaron una mesa muy bonita que parecía un tronco tallado y lacado. Los meseros muy pendientes y formales nos pasaron la carta de bebidas y luego la de comida. Algo que no me daba buena espina era esa mezcla mediterráneo-colombiana pero más aun la cantidad de platos que ofrecen con ingredientes tan variados (demasiados) y como si fuera poco un menú degustación como de 8 pasos. Mi plato fue el Cerdo que quiso ser pato pero no logró ser ni lo uno ni lo otro. Para mí fue el peor plato de la mesa por varias razones: Un plato desbalanceado, demasiado cochinillo, son como 6 rollos que simulan ser el pato laqueado chino, lo cual me motivó a pedirlo. La verdad es que el cerdo tenía un sabor algo peculiar más no del todo agradable y aunque su carne no estaba seca, el borde exterior estaba rodeado por una generosa capa de piel del cerdo totalmente cauchuda. lo rico hubiera sido esa piel totalmente crocante. Aparte, la salsa era prácticamente inexistente a excepción de un ají de maní que carecía de poder y sabor; los vegetales que acompañaban tampoco aportaban buen sabor. El descreste era la hojuela de carantanta a manera de chicharrón de paquete, pero tampoco aportaba sabor. Si quieren un plato similar con una rica salsa de maní vean la foto de la reseña de Mesa Franca. tuve la oportunidad de probar otros platos, el risoni un plato demasiado grande para una persona, punto de la pasta, pasada de cocción. Los ñoquis de arracada, difícil encontrarle el sabor al tubérculo y chicoleos completamente. El arroz con tinta de calamar, pequeño para dos personas sabor ok pero nada memorable, una entrada con camarones y suero, estaba rica y suave quizá lo mejor de la mesa. El detalle de la piñata de chocolate para el cumpleañero es un bonito detalle, bastante creativo pero ya que está elaborado con un chocolate de baja calidad y muy dulce se hace difícil de comer. Cada plato trae un detalle de una técnica de cocina de vanguardia interesante, pero la ejecución de la esencia del plato se queda corta. Los panes de cortesía estuvieron ricos unos de tomate y otros con picante. Me parece que este sitio quiere ser demasiado pretencioso y abarcar demasiado basado en la ayuda que tuvo del Chef Trincado (estrella Michelin) que ya se debió devolver a España hace rato. También hay que ser cuidadoso con esas fusiones entre dos mundos que pueden ser delicadas. Los cocteles no los probamos, lucían muy creativos con ese toque vanguardista del amo y el factor sorpresa. Pero la comida que es por lo que supuestamente se destaca el sitio, me quedó a deber.


viernes, 31 de agosto de 2018

La Diva

Estilo: Pizza
Sabor: 8
Ambiente:8
Servicio: 8
Presentación: 8
Precios fuertes: $25.000 - $35.000
Dirección: Cll. 93#13A-44


La Diva es un formato más o menos reciente de pizza que fue establecido inicialmente en Barranquilla y Cartagena. Ahora cuenta en Bogotá con dos sucursales. Por precios, esta pizzería le compite directamente a Julia, donde el promedio de una pizza personal ronda los $30.000. Su estilo lo confiere el tradicional horno de leña que le da un sabor característico a la pizza. La masa es bien delgada, sin embargo me pareció un poco superior en diámetro y contenido a las de Julia, que a veces son muy secas y llegan a estar quemadas según las manos del pizarro de turno. recordemos que estos hornos manejan temperaturas de cocción muy altas y tiempos muy cortos. Pedimos una pizza blanca con burrata y tocineta y otra con salsa roja y peperonni. Una crítica a la pizza roja es que la distribución de los ingredientes podría ser más uniforme, de manera que cada pedazo tuviera más menos la misma proporción de ingredientes. Seguramente esto se logra tomándose un poquito más de tiempo para armar la pizza. En cuento a sabor y textura me parece que sale mejor librada que Julia, la calidad de los ingredientes es buena. Unicamente logré ver algo quemados los bordes pero de manera moderada sin afectar la experiencia. Un punto positivo es que la pizza no llegaba a ser extremadamente delgada como para desmoronarse en las manos a pesar de los bordes ser inflados y huecos.
El ambiente del local es bastante ecléctico con una decoración interior llena de objetos colgantes en las paredes como pizarrones tipo espejo, lámparas metálicas, lámparas turcas, balcones colgantes con plantas e ingredientes tipo tomates, berenjenas, galones de aceite de oliva, entre otros. La terraza por el contrario puede ser bastante fría y algo despedidora. Son dos ambientes muy diferentes y de noche, la gente prefiere hacer fila para comer adentro con razón. La carta cuenta con pastas aparte de las pizzas, las cuales no probamos. la cocina interna no la pude observar bien aunque se veía algo de desorden. Todo lo que es refrigeración y el horno de leña si están a la vista. Los meseros fueron atentos en general. El servicio ni muy lento ni rápido. En la mesa colocan aceite de oliva, orégano y peperoncino. En términos generales nos pareció agradable y eventualmente volvería.

martes, 28 de agosto de 2018

Osaki

Estilo: Asiático
Sabor: 8.5
Ambiente: 8.5
Servicio: 9
Presentación: 8.5
Precios fuertes: $25.000 - $45.000
Dirección: Calle 118 # 6A-27

A estas alturas ya se puede decir que es un clásico de la cocina asiática en Bogotá y pionero del grupo Takami. Tras casi 10 años sin haber vuelto, decidí ver como había evolucionado la carta. Fui a su sede de Usaquén y noté que sufrió una gran ampliación, desapareciendo Horacio Barbato también del grupo. La carta compite con Wok, siendo los precios de Osaki un 20% más altos en promedio. Probamos un arroz frito con carne molida de cerdo, hierbas, huevo y pepino encurtido. Otro arroz de la india, el biryani y un ramen con pork belly. Este último fue el mejor sin lugar a dudas. Buena base del caldo, el pork belly asado a la perfección con poca grasa. El biryiani también estaba muy equilibrado, teñido con cúrcuma, unos toques de plátano dulce y marañones. El arroz frito aunque rico y bien presentado, estaba pasado de sal, debido al uso excesivo de la salsa de pescado, motivo por el cual me vi forzado a devolver el plato. El servicio al cliente fue muy bueno y el mesero no puso objeción alguna. El segundo plato mejoró el tema de la sal, sin embargo tuvo otro pequeño detalle, algunos granos de arroz estaban excesivamente tostados y se volvían un poco peligrosos para los dientes y muelas.  Los pepinos también podrían ser más encurtidos y con un toque más dulzón para balancear el tema de la sal. Las porciones son correctas.probamos un postre que era como un mousse de chocolate relleno de frutos rojos. Estaba bien rico, sin embargo los frutos rojos se sentían poco comparado con la cantidad de chocolate. El lugar es agradable, ya que es una casa antigua de conservación de la zona con un patio interior.  En términos generales Osaki sigue teniendo buen nivel y se puede volver a probar otros platos. Creo que Wok está al nivel de Osaki con una leve diferencia de precios en favor de Wok. En cuanto al sushi, tocaría probar el de Osaki.

miércoles, 25 de julio de 2018

Canoa

Estilo: Taberna japonesa
Sabor: 8.5
Ambiente: 8
Servicio: 9
Presentación: 8
Precios fuertes: $25.000 - $40.000
 Dirección: Cr. 4A # 66-78

Cuando se trata de un restaurante oriental, mi opción a la fija es Wok. Sin embargo he decidido darle cabida a sitios diferentes que pueden estar haciendo las cosas bien. Este lugar engaña  en su exterior, ya que se ve bastante angosto y pequeño, pero la realidad es que apenas entras es un corredor bastante profundo y con buena cantidad de  mesas. El ambiente es oscuro pues prácticamente no tiene iluminación natural y creo que quiere semejar un bar en Tokio o Nueva York. La carta está muy enfocada hacia platos japoneses. Encontramos gyozas, rollitos primavera, los famosos pinchos japoneses, entre otras entradas. Cuentan con sopas ramen y una tailandesa, algunas proteínas a la parrilla y una amplia carta de sushi que en teoría es el fuerte del sitio.
Probé un roll, un yakimeshi (arroz frito), un ramen y el pulpo a la parrilla. Inicialmente mi opción era el ramen, pero me dejé tentar por el pulpo, ya que rara vez lo prepara uno en casa. El pulpo fue el lunar de la comida. Venía a la parrilla tajado en rodajas sobre lechugas y una salsa oriental. Lamentablemente estaba cauchudo y le faltaba ese tostado de parrilla. Inmediatamente devolví el plato y aceptaron el cambio sin ningún problema. La falla fue que de la cocina no hubiera debido salir nunca ese plato así tuvieran que decir que se había agotado. Lo bueno fue la respuesta positiva y el postre de cortesía para la mesa por el error. En su cambio, probé el ramen de cerdo, el cual estaba muy rico, buen caldo de base, cerdo con buen sabor a parrilla, fideos, raíces chinas y medio huevo cocido como es tradición. (lo único a mejorar, el huevo estaba algo frío, seguramente estaba en nevera y tocó sumergirlo bien en el caldo. El sushi bueno, de vegetales tempura y picadillo de salmón encima de cada bocado. precios del sushi algo elevados, promedio $30.000 por rollo. El arroz frito mixto de buen sabor, buena cantidad, un poquito pasado en aceite, lo único a mejorar. De postre nos llevaron un sticky toffee pudding que como referencia tengo el de wok. Era una torta casera con dátiles y helado, no estaba mal pero no era memorable como el de wok. Quiero rescatar la buena actitud de los meseros y cocineros ante la falla del pulpo, con lo cual melero una buena imagen del sitio. Un consejo si la consistencia en la calidad del pulpo es muy variable, mejor retirarlo de la carta.



viernes, 20 de julio de 2018

La boutique de las carnes

Estilo: Carnes
Sabor: 9
Presentación: 8
Servicio: 8
Ambiente: 9
Precios fuertes: $20.000 - $40.000
Dirección: Cr 14 # 97-62


Esta es la segunda sucursal de este sitio para los amantes de las carnes. Un local bastante grande ubicado en el primer piso de un nuevo edificio de la zona. Apenas se ingresa, a mano izquierda encontramos varias neveras con carnes para llevar, diversos cortes de res, ganado 100% colombiano libre de hormonas con técnicas modernas de maduración y cortes tipo argentino. El local asemeja un steak house gringo con su gran infraestructura, persianas de madera, sillones largos muy cómodos con espaldar tipo puff. Un buen montaje en general, la cocina en esta ocasión es cerrada. La carta con cortes muy argentinos, algunas entradas y una sección de hamburguesas. El primer mesero que nos atendió tenía buen conocimiento de las carnes, el segundo más bien poco. Sin embargo fue amable e incluso accedió a hacer un cambio después de haberse realizado el pedido. Probamos las hamburguesas y el bife paletero. La hamburguesa me pareció buenísima, creo que en conjunto se acerca a lo que para mí es una hamburguesa perfecta. 200 g de una mezcla de cinco cortes a la parrilla, tomate, lechuga, cebolla, poca salsa, pan brioche muy bueno, esponjoso, húmedo  y marcado por un hierro, nunca se deshizo. Carne tres cuartos, quizá un toque pasada de punto pero nada preocupante, nunca seca. Buena maduración, gran sabor, en especial el primer bocado con toques de parrilla. Yo pedí la mía que venía con queso y tocineta. La tocineta de muy buena calidad, aroma ahumado y más bien magra. No abusan de los toppings de la hamburguesa ni de las salsas y eso me encanta, solo 6 tipos de hamburguesa con variantes muy concretas incluyendo una vegetariana, nada extravagante o recargado. Así pude apreciar lo más importante, el sabor de la carne y comprobar su calidad. Para acompañar aparte pedimos unas papas en casco muy generosas y bien fritas. La salsa bbq que sirven aparte me gustó bastante. Tuve la oportunidad de probar el bife maletero que es un corte debajo del omoplato, bastante magro pero a pesar de ello con buen sabor y muy suave. Los acompañamientos de las carnes también son aparte. Precios justos para la calidad y la cantidad, incluso inferiores a otros negocios de este estilo. Cuando quiera una buena hamburguesa volveré. Actualización septiembre: Tras una nueva visita me encuentro con el mismo buen sabor a brasa de las hamburguesas de la primera vez, sin embargo noto dos detalles: el pan una vez se humedece se vuelve algo chicloso en la boca y las papás rústicas, aunque caseras y crujientes afuera, por dentro estaban algo duras, no se si por la calidad de la papa o falta de cocción en el centro por el grosor de los cascos.

domingo, 15 de julio de 2018

Cosette

Estilo: Francés café bistro
Sabor: 9.5
Ambiente: 9
Precios fuertes: $30.000 - $50.000
Presentación: 8
Servicio: 8
Dirección: Centro comercial Andino


Este es un nuevo concepto del grupo DLK. Hace parte de la tendencia moderna de restaurantes totalmente montados dentro de centros comerciales. A pesar de contar ya con un restaurante francés, el grupo DLK crea otro nombre con un menú más reducido. Por supuesto, el local de una gran infraestructura, con una cocina abierta enorme con división de vidrio, techos muy altos, mucha madera, en fin, toda la experiencia y músculo que estos grupos utilizan para montar sus restaurantes. 
Existe una división entre su carta de café y bistro. La primera se compone por crepes de sal y de dulce, donuts, helados y algunos productos de panadería (croissants, baguette) y pastelería donde ofrecen algunas tortas. La carta de comidas, cuenta con entradas, ensaladas y fuertes. En esta prueba, ensayamos los crepes, un entrecote y la clásica sopa de cebolla francesa.

El servicio fue relativamente rápido. Quiero empezar por la sopa, increíble sabor, cuerpo, color intenso oscuro, tal vez la mejor sopa de cebolla que he tomado en mi vida. Gratinada en horno con pan y queso como es costumbre. 

Los crepes, de buen tamaño, muy al estilo francés, sin salsa, buena masa, el relleno de queso ahumado y hongos muy rico, acompañado con ensalada. La ensalada bastante fresca con tomates cherry, lechuga y aguacate, bien aderezada con una vinagreta. El entrecote en su punto, buen sabor, tajado en rodajas, buenas papas fritas delgadas y también acompañado con ensalada.

Es buena la primera impresión que deja este restaurante y con ganas de volver a probar otros platos.


lunes, 9 de julio de 2018

El Khalifa

Estilo: Arabe
Sabor: 7.5
Servicio: 8
Ambiente: 7
Presentación: 8
Dirección: Social (Parque de la Colina)


Un viejo conocido que decidió concentrarse en centros comerciales, desistiendo de sus sedes formales principales de la cr 11 con 87 y su último intento en la zona G. Su más reciente apertura en el Centro comercial Parque de la Colina en la zona conocida como Social, que agrupa una serie de restaurantes en un ambiente más acogedor que la típica plazoleta de comidas, ya que cada restaurante tiene su propio local con mesas y sillas y el servicio es a la mesa. Este concepto se ha ido desarrollando en distintos centros comerciales con el objetivo de crear espacios gastronómicos más agradables en los centros comerciales. Como curiosidad, Social cuenta con una agrupación musical que toca covers. En particular, el local del Khalifa es uno de los más pequeños y no está tan bien adecuado como por ejemplo Gordo, la Bifería, entre otros, esto hace que se sienta menos acogedor. Su menú consiste en platos mixtos, donde se puede degustar un poquito de cada cosa, están los shawarmas, los kebabs, hay pitas. En general la comida estuvo bien, deglutamos un mixto árabe y una pita griega con carne molida espaciada. Todos los sabores y texturas estuvieron correctos. Los precios son bastante cómodos. Es una comida rápida a un nivel superior.

viernes, 22 de junio de 2018

Barra Chalaca

Estilo: Peruano
Sabor: 8
Ambiente: 7.5
Servicio: 8
Precios fuertes: $25.000 - $40.000
Dirección: Calle 93b # 11A - 26


Una nueva alianza entre el magnate restaurantero Leo Katz y Gastón acuario, para traer este concepto peruano relajado si se puede decir, algo informal. Con un ambiente playero, ubicado sobre el parque de la 93, un ambiente ruidos, estrecho, colorido, conn mesas altas de madera y asientos con espaldar de fique ( las sillas son incómodas). La carta variada, ceviches tirados, sopas, platos con toque chivas y nikkei. Los meseros muy atentos, pendientes. Probamos un tiradero, muy bueno, la presentación muy buena, tamaño también. Uso de mojarra prolífico. De los tres fuertes nos gustaron dos. Un chupe con pescado, asumo que también tenía mojarra y la pasta nikkei con pescado (Mojarra?). No hay variedad de pescados, aunque aquí en Bogotá es complicado encontrar buen pescado fresco, por lo cual a veces es mejor manejar poca variedad sin sacrificar calidad. El arroz chaufa aunque muy abundante, estaba algo duro, parecía arroz parborizado con un sabor pasmado, seco y faltó a mi punto de vista cocción. Coronado con una tortilla de huevo con camarones. En términos generales, los sabores son interesantes.La sazón se siente original y bien logrados los sabores. La vajilla es peltre de colores alegres. No es el sitio más cómodo eso sí. Actualización marzo 2019: Una nueva visita a la nueva sede de la 109 me deja con mejor sensación de satisfacción que la primera vez. Pedí el cau cau de mejillones (6 mejillones pequeños negros), el cual traía además almejas, tres camarones pequeños, papa arveja y maíz. La falla de este plato estuvo en las almejas principalmente, las cuales estaban cauchudas y los granos de maíz duros, adicionalmente la porción era más bien pequeña. También notamos que el arroz que acompañaba el lomo saltado le faltaba cocción. Cabe destacar la salsa del lomo saltado que tenía buen sabor. También falta ofrecer alguna cortesía para el nivel de precios del restaurante.

viernes, 15 de junio de 2018

Mesa Franca

Estilo: Autor colombiana
Sabor: 8
Ambiente: 8
Servicio: 8
Precios fuertes: $25.000 -  $45.000
Dirección: Cr. 6 con calle 55

Ubicado en Chapinero alto, este antiguo barrio, ha surgido tímidamente como una nueva zona restaurantera alternativa en la ciudad. Sus grandes casonas, ahora se han convertido en cocinas. Mesa franca propone un menú variado con toques de autor y un énfasis marcado en el uso de ingredientes colombianos. Los platos probados fueron la panceta ahumada de manera artesanal en el mismo restaurante sobre salsa agridulce de maní, rugula y pan campesino. Muy buen plato, el ahumado realmente especial, el contraste con la salsa de maní espectacular. El otro plato probado fue el encocado, típico del pacífico colombiano, con camarones, guiso, leche de coco, aguacate y arroz soplado. Este plato estaba ok, aunque le falto algo de fuerza en la salsa y el arroz soplado no me cuadraba mucho como acompañamiento, demasiado ligero y sin sabor, aunque entiendo que la clave es mezclarlo con la salsa. De entrada, unos buñuelos de yuca rellenos de trucha ahumada, estaban suaves, faltó mas de sabor. El servicio es correcto, el ambiente también mas no sobresaliente. Precios medios altos. En términos generales es una propuesta interesante con énfasis en las raíces colombianas.

viernes, 8 de junio de 2018

La Lucha

Estilo: Sanguches peruanos
Sabor: 8
Servicio: 8
Ambiente: 8
Presentación: 8
Precios Fuertes: $15.000 - $20.000
Dirección: Calle 93 con cr. 12


Llega la franquicia directamente de Perú. Esta famosa sanguchería ha sido muy exitosa en Perú, donde tienen una gran cantidad de puntos. Quien ha ido a Perú en los últimos años, sabe que los sanduches son algo especial y algo más que jamón y queso. En especial el lechón que es cocinado a fuego lento por varias horas, para luego ser tajado y puesto entre dos panes. También lo son las salsas, donde reina la cebolla roja y las cremas de ají. Por supuesto, no pueden faltar unas papas. Primero hablemos del local. Un sitio muy amplio y bien adecuado. Como un sitio de comida rápida, el menú está expuesto en carteles luminosos encima de las cajas donde se realizan los pedidos. La carta está dividida en sanduches y jugos.

Una buena cantidad de meseros todos curiosamente uniformados de blanco y con un gorrito tipo años 50's. Una vez realizado el pedido, le es entregado al cliente una banderita con un número, la cual debe permanecer en la mesa para que los meseros sepan donde llevar la comida. Este sistema podría ser mejor, ya que vi a una mesera algo perdida buscando la dichosa banderita de algún cliente. Los empaques donde vienen los sanduches son bien pensados, originales y de un cartón reciclable. Un punto muy agradable es el olor que emanan las carnes que se están cocinando en leña. Dentro de las carnes encontramos un corte de res, lechón, cerdo crocante o panceta, pavo, pollo, entre otros. Un extra muy generoso son las salsas adicionales, las cuales no tienen costo alguno, y dentro de las cuales encontramos, aguacate, de ají, hogao, entre otras. Los precios son económicos, y si evaluamos la relación calidad, tamaño precio, sale bien librado. La calidad de las carnes es buena, ya que las carnes son horneadas en la mañana para consumo de ese mismo día. Los panes son tipo francés circulares y se sienten frescos. Las salsas unas mejores que otras, les falta algo. El tamaño del sanguche es correcto sin embargo la carne del relleno se queda algo corto. Las papas fritas de papa amarilla bien crocantes y suaves por dentro. Los jugos naturales muy buenos. 
En general es una propuesta diferente para el panorama de las comidas rápidas en Bogotá, para ir de vez en cuando. Actualización: En una segunda visita, me tocó el local casi a tope, algo de fila para hacer el pedido, el pedido tardó mucho más en ser llevado a la mesa. Tuve mayor chance de detallar algunas cosas. Las mesas en ocaciones se comparten, las sillas son bancos en madera algo duros. Esta ocasión pedí el sanguche La Lucha con cerdo crocante; debería ser más crocante, ya que la panceta que trae es muy grasosa, entonces esa grasa debería estar más derretida pues de cada bocado, casi 50% es la grasa de la panceta. Las papas que me habían encantado la última vez, les percibí más grasa, se notaba en su color algo oscuro y aunque son bastante huecas y eso da una sensación de crocancia interesante, deberían cuidar más la absorción de grasa, supongo con control de temperatura en la fritura. Los jugos como la primera vez, impecables, de pura fruta.

lunes, 28 de mayo de 2018

Chichería Demente

Estilo: Piqueteadero Gourmet
Sabor: 8.5
Servicio: 8
Ambiente: 8.5
Precios fuertes: $30.000 -  40.000
Dirección: Cll. 69 # 15-08

Ubicado en un antiguo barrio capitalino y un sector que no tiene tradición restaurantera donde antiguas casas conviven con talleres, debajo de la avenida Caracas, muy cerca a Hipermar. Una gran casona patrimonio arquitectónico acoge esta nueva propuesta un tanto diferente del asadero o piqueteadero tradicional, ofreciendo una propuesta más elaborada y con sabores diferentes, un tanto internacionales de diferentes cortes carnívoros, la mayoría con hueso, el uso de la brasa y una propuesta de platos para compartir. La carta es muy concisa y corta, con unos cuantos acompañantes y unos cuantos cortes. El ambiente me recuerda a un restaurante como el Humero en Chía, techos altos en madera, aspecto de bodega, mesas de madera, mucho menos saturado en cuanto decoración que un Andrés carne de res. En el centro hay una isla muy grande donde se encuentra la cocina abierta. Probamos el corte de cerdo y el de res, ambos con hueso y un sabor a brasa muy agradable. El cerdo traía unos pedazos de piña asados con algún tipo de picante. En los acompañamientos hago mención especial a los hash brown de papa nativa con guacamole y una especie de hogo, simplemente espectaculares, livianos, crocantes, salsas increíbles. También probamos la mazorca con suero y una especie de pesto en una presentación original y las empanadas de maduro con manzana y queso. También tienen un par de pescados y mariscos, gallina y hasta conejo. De cortesía nos dieron una especie de guarapo de piña. Este es un sitio diferente en el que uno se siente fuera de la ciudad, me gustaron los sabores, la originalidad de las presentaciones y la ejecución de los platos. vale la pena probarlo.


Dos Chingones

Estilo: Taquería
Sabor: 7.5
Servicio: 8
Ambiente: 7.5
Presentación: 8
Precio fuertes: $20.000 - $35.000
Dirección: Cr 19 con 106

Los sitios de comida mexicana no son muchos actualmente en Bogotá, otros son más tex mex que mexicanos. El concepto de taquería no está muy difundido en nuestro país. Es bueno ver negocios de este tipo aparecer actualmente. A parte que la comida mexicana es una de mis favoritas. En Dos Chingones, el concepto es de un sitio de comida rápida con servicio a la mesa. La estructura del local es moderna y juvenil, realmente es un sitio informal. Su carta es reducida, básicamente hay tres entradas, tortas (sanduches en México), los tacos que tienen 7 variedades, tres postres y bebidas. 
Las ventajas: puedo comerme desde un taco en caso de querer probar, la desventaja, son pequeños en tamaño y relleno y seguro van a querer comer más. Para almorzar solo tacos recomiendo pedir por lo menos 4 tacos. Los sabores están bien logrados. Pude probar las 7 variedades de tacos y todos tenían buen sabor, en especial uno con camarones rebosados que recomiendo mucho!. También probé los esquites de entrada o maíz desgranado con salsa y queso que vienen en un vasito con cuchara. De postre probé la galleta de churro rellena de helado. Buena presentación, textura suave del churro. Todo es servido en vajilla plástica, incluyendo los jugos en desechables. Las bebidas me parecieron caras, ya que las gaseosas rondan los $6.000 y los jugos casi $8.000, aun cuando se que muchos restaurantes compensan con las bebidas. Los tacos están alrededor de los $7.000 y creo que las tortas por los $20.000. Los meseros siempre estuvieron muy atentos, incluso cuando reclamamos un error en la cuenta, el trato siempre fue amable. En términos generales los Chingones lograron capturar la esencia de los sabores mexicanos, aunque hay que tener cuidado porque si uno pide y pide de taquito en taquito la cuenta puede ascender más de lo que uno desearía pagar en un local de comida rápida. Actualización: Una nueva visita me lleva a bajarle medio punto al local. Sopa de tortilla ok, flautas, masa muy gruesa, no logra cocerse bien  y tacos muy pequeños en su contenido.

martes, 13 de febrero de 2018

Buffalo Wings

Estilo: Fast food, alitas
Sabor: 8
Ambiente: 8
Servicio: 9
Presentación: 8
Precios fuertes: $20.000 - $30.000
Dirección: 


Está franquicia del Salvador se ha ido expandiendo en Colombia está década con paso firme y trayendo otra tenencia con el tema de las alitas estilo americano. Son múltiples los negocios actuales que podemos encontrar de este tipo, sin embargo estas son las mejores alitas que he probado, no es que haya probado muchos sitios de estos pero este negocio la tiene muy clara. El menú fotográfico de la carta coincide perfectamente con la realidad. La presentación es muy uniforme. Probamos las alitas clásicas con salsa de queso parmesano y ajo  y unos chunks hechos de pura pechuga, muy bien apanados, crocantes por fuera a pesar de ir bañados en salsa bbq de miel y tiernos por dentro. Además vienen acompañados con los clásicos bastones de zanahoria, apio muy bien cortados y salsa ranch. Como si fuera poco está explosión de sabores, podemos escoger una salsa picante que viene en 5 niveles. Yo probé el nivel dos yendo del más suave al más fuerte y aunque creo que hubiera aguantado el siguiente nivel, estuvo bien así. Tienen alrededor de 10 salsas distintas para bañar las alas y chunks. Adicional ordenamos una porción de papas con queso fundido que alcanza perfectamente para dos personas. la decoración es muy contemporánea y tiene ese aire gringo con el rollo de papel cocina en las mesas en lugar de servilletas. El mesero explica bien la carta, aunque estaba algo impaciente porque ya casi iban a cerrar. Las bebidas también las sirven en unos jarros de vidrio especiales. Yo pedí una limonada rapé de mango. Estaba tal vez un poco muy ácida, sin embargo, cortaba bien toda la grasa de esta poderosa y pesada comida. Creo que es un lugar para repetir de vez en cuando. Los precios no son económicos para ser comida rápida pero son razonables acordes a la calidad y cantidad. Una porción de alas o chunks son 10 unidades. En general buenos sabores a veces explosivos que vienen bien de vez en cuando! Actualización marzo: Una nueva visita a otra sucursal me confirma que los empleados están muy bien entrenados. Pedí unos chunks con una salsa y por error del cocinero me trajeron las piezas bañadas en otra salsa, sin embargo no tuvieron ningún reparo en cambiar las piezas. De paso escucharon mis comentarios sobre la acidez de la limonada de mango y esta vez estuvo mucho mejor. La calidad se mantuvo, quizá el apanado algo menos crocante.





lunes, 12 de febrero de 2018

Bun burgers

Estilo: Hamburguesas
Sabor: 7.5
Presentación: 7.5
Servicio: N/A
Ambiente: 8
Precios: 11.000 - 20.000

Dirección: Cr 19 # 106-


Otro local más de hamburguesas como si hubiera pocos. De repente me despierte la semana siguiente y encuentre un local al frente de mi casa!. Esta nueva propuesta por ahora copia la sencillez de Home Burger en cuanto al menú se refiere. De hecho lleva menos de un mes de abierto, todavía no tiene un menú visible impreso ni de display dentro del local. La adecuación del local es agradable, incluso encontramos un pequeño árbol incrustado alrededor de unas mesas. La cocina es abierta y muy amplia. Por el momento solo ofrecen hamburguesa sencilla o doble con queso y tocineta, aunque el día que estuve no tenían tocineta lo cual no está bien pero lo perdono, ya que están arrancando y medir el inventario es complejo. A pesar de estar vacío el local me anime a probar y puedo decir con propiedad que es una hamburguesa superior en sabor y textura a Home Burger y smoking Burger, ya que son conceptos muy parecidos, sobre similar con el primero. La última vez que estuve en Home burger no fui capaz de terminar la hamburguesa, simplemente el sabor no me gustó y dejaba un dejo en la boca que no era de mi agrado, la carne también tendió a endurecerse un poco. En este caso, aunque es la clásica hamburguesa, nada desentonó, el pan liviano y tierno, verduras frescas, y la carne jugosa hasta el final, y de buen sabor, incluso estando ya fría. Tampoco apareció algún rastro de rila o cartílago desagradable en la carne. Las papas son caseras, no estaban mal pero podrían ser mejores, se ablandaron muy rápido. Las salsas que vienen a un costado promedio, también podrían ser más especiales. Tienen cerveza de sifón Buho Dorado, no la probé. En la medida que vayan despegando, creo que pueden introducir nuevas adiciones al menú y diferenciarse de la competencia que no es poca. Por ahora lo veo como un Home Burger mejorado. Es un lugar al que volveré y es un buen desvaré hamburguesero con potencial. Actualización: una nueva visita  muestra un local con más gente y un menú legible en la caja. La hamburguesa bien nada destacable, algo más seca que la primera vez.

miércoles, 3 de enero de 2018

Coctel del mar (Asiático)

Estilo: Oriental
Sabor: 7
Servicio: 7
Ambiente: 7.5
Presentación: 7
Precios fuertes: $20.000 - $30.000
Dirección: Cr. 19 # 123-26


Esta era una visita que había que hacer en algún momento, ya que durante años he sido cliente de los productos de Hipermar, pero nunca había sentido realmente ganas de sentarme y almorzar en su restaurante de la sede original en la 69 con 17. Esta nueva sede, es de unas dimensiones impresionantes, ya que es un edificio totalmente nuevo con 5 pisos y dos sótanos de parqueadero. Un fin de semana en horas pico, la afluencia de gente es impresionante y más por tratarse de un local nuevo. Fila de hasta 20 carros esperando para parquear, fila para entrar al restaurante, lo cual parece haberse convertido en una tendencia de mal gusto, lease Crepes o Wok por ejemplo. Las instalaciones son muy modernas, la capacidad de los restaurantes muy amplia, sin embargo en horas pico no da a basto. Hipermar llega a competir con todos los negocios relacionados con productos de mar de la 19 como Wok, Central, Teriyaki y más abajo Pesquera Jaramillo. Cada uno de los anteriores negocios tiene su público objetivo, sin embargo llegan a cruzarse en algún punto. Claramente el atractivo de Hipermar son sus bajos precios y cantidad generosa. Pedimos una entrada caliente con varias frituras entre ellas calamares y langostinos apanados, papas a la huancaina con chicharrones de pescado y tequeños de atún. En este punto todo estaba bien sin ser espectacular. no percibí el sabor típico de la huancaina y el relleno de los tequeños no me cuajó del todo. De fuertes pedimos pasta soba con frutos de mar (palmito de cangrejo, pulpo baby, camarones, langostinos y calamares), la pega de arroz, que realmente no es pega sino bloques de rice krispy bañados con una salsa agridulce a base de tomate, vegetales y langostinos y un roll de sushi. La pasta estaba bien de cocción y generosa en proteína. El plato agridulce bien en general, quizá un poco muy dulce para mi gusto y el sushi estaba muy mal. Aquí hago referencia al arroz del sushi, se veía viejo y triste. A duras penas se probó la mitad y la otra mitad lo cambiaron por otro roll en este caso de salmón, ya que el original era de atún.  En ambos casos, el arroz sufrió las consecuencias de no quedar en su punto, en el segundo intento pasado de cocción y de dulce. Aquí es donde surge el problema cuando se subestima la cocción del arroz y en general la preparación del sushi, pues ahora lo ofrecen como hacer empanadas. Los jugos es otro punto a mejorar, son muy aguados, no se comparan por ejemplo con los increíbles jugos de wok.
A los meseros les falta un poco de entrenamiento, pues no conocen a fondo la carta, cuando expli
can los platos. yo pedí in poco de picante para mi plato (sriracha) y me trajeron ají fresco licuado de un nivel de picor que podría hacer ahogar a algún comensal y no advirtieron el nivel de picante. En general el ambiente es bueno, el problema es que cuando está lleno, se siente uno como en una gran cafetería por el bullicio de la gente. Si van a probar, no se hagan ilusiones pensando que es el gran restaurante gourmet, esta es una opción para presupuestos ajustados y paladares no muy exigentes. Quizá pecan un poco por ser tan masivos.

The Market

Estilo: Internacional
Sabor: 7.5
Ambiente: 8
Servicio: 9
Precios fuertes: $25.000 -$50.000
Dirección: Cll 73 # 8-60


Ubicado en el hotel JW Marriott, fuimos por los comentarios que habíamos escuchado en especial de sus hamburguesas. Debo confesar que no soy muy fan de los restaurantes dentro de los hoteles, ya que generalmente resultan siendo aburridos. The Market en un concepto con un menú variado que ofrece desde una barra de ensalada, pasando por un menú donde uno puede diseñar su hamburguesa y platos más elaborados. Lo novedoso de las hamburguesas es que se puede escoger ente diferentes tipos de panes, cortes de carnes dentro de los que se pueden escoger entraña angus, tradicional (lomo ancho), punta de anca, rib eye y otras carnes como pollo, cordero, atún, entre otros. Las salsas y toppings también se pueden escoger, siendo 4 el límite de los toppings y dos de las salsas. El acompañamiento puede ser papas a la francesa o anillos de cebolla. Lo que en un principio parece muy atractivo con tantas opciones, puede resultar no tan favorable en últimas, ya que las combinaciones pueden ser algo hostigantes. Mi recomendación es limitarse a un queso y quizá tocineta y el tradicional tomate y lechuga, evitando las salsas, máximo una. la presentación es buena, la canasta metálica para las papás imitando una freidora es un buen toque; las porciones son extremadamente abundantes, el tamaño de la carne calculo debe ser alrededor de media libra. La carne tiene un dejo a parrilla muy agradable. Comparamos sabores de entraña, punta de anca y rib eye. El mejor fue el de la entraña. Todas las carnes estaban algo secas, creo que pueden sufrir por la cocción a la parrilla y quizá por la falta de grasa en los cortes. Me gustó el grosor de la carne, por lo menos dos centímetros. Para mí lo ideal es mezclar por lo menos dos tipos de cortes. El otro imperfecto fue en la textura de la carne, ya que en algunos bocados percibí como si no hubiera molido bien la carne, aunque en general vi que aplicaron molienda gruesa, lo cual es bueno. Las papas salieron crocantes aunque industriales y se les fue la mano en la sal. yo me hostigué un poco con las salsas ya que pedí por malentendido salsa chili y era la típica oriental de chiles agridulces en lugar de chili con carne, relish de pepino que también era agridulce, jack daniels que era una bbq con whisky, muy fuerte y me hizo falta la frescura del tomate y la lechuga que fue reemplazada por cebolla caramelizada (muy dulce) y champiñones salteados. En términos generales terminé algo hostigado y me costó mucho terminar la hamburguesa. Valoro la iniciativa de dar tanta elección para armar tu propia hamburguesa, sin embargo es un arma de doble filo, a veces entre más simple mejor y para las hamburguesas aplica muy bien esta frase. Relación calidad precio está bien, incluso a $30.000. cada una no es caro dada la cantidad, aunque yo hubiera preferido un tamaño más contenido tanto de papas como de carne. Las bebidas en particular la limonada con extracto de manzana y hierbabuena, muy rica pero muy costosa. ($15.000 c/u) Los meseros son muy atentos, el ambiente del restaurante es espacioso y agradable. La mejor hamburguesa de la ciudad....no lo es. La idea de generar tantas combinaciones aunque suena buena alternativa, al final termina jugando en contra del cliente que puede sobre saturarse con las combinaciones de las salsas y toppings. A veces menos es más.


sábado, 9 de diciembre de 2017

Italia Rústica

Estilo: Italiano
Sabor: 7.5
Ambiente: 8
Servicio: 8
Precios fuertes: $30.000 - $60.000
Dirección: Cll. 119B # 6A-18


Este es otro restaurante temático  de quien parece querer ser el nuevo Leo Katz de Usaquén. Basado mucho en la cocina mediterránea como lo hace en mediterránea de Andrei, Grecia, entre otros, con una ambientación tipo cava nos presentan un menú variado desde pizzas, pasando por sopas, por supuesto variedad de pastas que incluyen lasañas, ravioles, espaguetis y postres. Se aprecia variedad y algo de distinción frente  al típico restaurante italiano. Probamos un par de sopas, una con frijoles y prosciutto y otro con hongos y berenjena. Ambas de buen tamaño, con quien alguien puede quedar comido bien. En general destaco las porciones que son generosas, por lo menos en los platos que pedimos. Otro plato diferente fue la salchicha italiana en salsa de tomate y polenta. El otro plato fueron unos ravioles gigantes rellenos de calabaza en salsa blanca. De postre probamos la pera al vino tinto con helado de vainilla y queso gorgonzola, tal vez lo que menos me gustó. La pera estaba suave de textura pero un poco pasada de dulce y no me fascinó el corte con el queso azul. En general los precios son altos, aunque nuestros platos eran de los más económicos de la carta. El servicio fue bueno, no más un poco demorado. En general, el restaurante maneja una estructura similar a sus otros locales en cuanto al diseño de carta, nivel de precios, ambientación temática. En general es un buen sitio, pero no para ir cada ocho días.