EL TROMPO

Estilo: Mexicana express
Sabor: 6
Servicio: 8
Ambiente: 6
Rango fuertes: $3.000- $11.000
Presentación: 6
Dirección: Cll 113 # 7 - 45


Después de leer bastante publicidad en un diario local, incluida una crítica gastronómica bastante favorable, logramos ir al Trompo, ubicado en el Teleport, diagonal a la Embajada Mexicana y en el corazón de la nueva zona de negocios de Usaquén. Con horario enfocado en atender las hordas de oficinistas que se abarrotan hacia medio día y ocasionalmente a la hora del desayuno, tocó ir un día entre semana, ya que ese complejo es muerto los fines de semana. El local tiene un pedazo de una terraza exterior, la cual recomiendo por encima del local interno, el cual es muy ruidoso y su único mesero se pasea como en una maratón de una mesa a la otra llevando y recogiendo platos. La vista interior da a una cocina a la vista con una nevera de Coca-Cola. los colores, blanco, naranja y negro, dan un ambiente frío con un televisor plano que cuelga en una pared con las noticias del medio día. En cada mesa hay pequeños tazones con diferentes aderezos como pico de gallo, cilantro, cebolla, salsa verde, roja y de chipotles. La carta está dividida en varias secciones: tacos, alambres, sincronizadas, quesos, sopas y antojitos. Básicamente todas las opciones son similares con variaciones en el tipo de tortilla utilizado (maíz o trigo). Nos antojamos de la popular sopa de tortilla; de tamaño generoso, algo espesada (harina o tortilla, de poco sabor su fondo y de un color pálido que no refleja su elemento principal, el tomate. para acompañar nos traen queso mozarella, aguacate y crema de leche, sin embargo tenemos que darle más sabor con la salsa de chipotle. Luego esperamos un buen rato y nos traen un alambre con cuatro tortillas de maíz Bimbo con la carne de cerdo al pastor sacada del trompo y mezclado con pimentón, cebolla y mini trozos de tocineta y queso. de sabor estaba bien, nada espectacular, pero la carne se sentía un poco dura y con algo de nervio. Definitivamente las tortillas Bimbo son un poco desabridas y pálidas. Luego llegó una costra de pollo que es el queso tostado, envolviendo el pollo, sobre una tortilla de maíz. El plato se ve muy triste sin colores como llega a la mesa y depende de uno darle algo de vida con los aderezos; esta costra fue quizá el mejor plato en cuanto a sabor y textura, ya que el pollo se sentía jugoso y la costra de queso crujiente y de buen sabor.
De postre se pidió un flan con caramelo...nada especial, bastante plano y da la impresión que fuera un flan industrial como los que venden en supermercado y no casero.
Precios cómodos para la oficina, porciones livianas, realmente para pedir dos opciones, sabores semi mexicanos que se quedan cortos ante una verdadera taquería mexicana. Alianza estratégica con Bimbo....???