Julia

Estilo: Pizza
Sabor: 7.5
Servicio: 9
Ambiente: 9
Precios fuetes: $20.000 - $30.000
Dirección: Cll 85 # 12 - 81

Una segunda visita después de mucho tiempo en un nuevo local, sobre la calle 85. El lugar, un poco más grande que el local de la zona G, pero conservando el mismo estilo, tipo bodega, un lugar muy acogedor y cálido en todo sentido, pues la temperatura se siente bien alta, debido a su poca ventilación y la inclusión de un horno de leña en medio del local. Techos más bien bajos, el uso de mucha madera oscura rústica que incluye los pisos, una luz tenue, cava de vinos italianos, bar a la entrada con barra y techos en azulejos brillantes. Aunque los espacios son restringidos y creo que en caso de un incendio sería fatal, el sitio se siente muy acogedor. La carta muy corta, se limita a unas ensaladas, antipastos y pizzas personales con mucha personalidad italiana. Hay que destacar que los ingredientes son muy especiales, todos importados, desde el tomate para la salsa, hasta los quesos. Creo que ahí radica parte del éxito de su comida, quizá por esto sus precios son tan elevados, ya que una pizza sencilla cuesta unos $20000, mientras que una con ingredientes algo más complejos borda los $30.000, precios que doblan por ejemplo lo que cuesta una pizza personal en papa John's, aunque no es justo comparar, pues este no es un sitio de delivery. El objetivo en Julia es recrear al máximo una verdadera pizza italiana. Su masa ultra delgada con bordes inflados, preparada en horno de leña, la hacen muy especial. Los ingredientes son de primera. Me parece que respecto a la primera vez, el tamaño y la generosidad de los ingredientes fue aumentada para bien, ya que sus precios son bastante altos y la cuenta puede estar a la altura de cualquier restaurante de moda de la zona, así que si va con la idea de la pizza económica, mejor no entre. Dentro de los ingredientes probamos los tomates, mozarella, parmesano, regianno, fontina, aceitunas, radichio, panceta, anchoas blancas (deliciosas y muy suaves), alcaparras; una ensalada muy fresca y bien aderezada y un postre de duraznos al horno con crumble y helado. Algo importantísimo es que desde que uno entra al local, los olores lo invitan a comer. La atención de sius meseras y maitre de primera, muy amables.
Actualización Octubre 2014: Una nueva visita con dos pizzas no tan afortunadas. Estaban un poco secas, en parte porque eran de esas pizzas sin salsa de tomates y pasadas de sal, en el caso de la cuatro quesos y la otra con tartufata, hacían que fueran monótonas de comer.