Sabor: 7.5
Servicio: 9
Ambiente: 9
Rango precios fuertes: $15.000 - 45.000
Relación calidad precio: 8
Dirección: Cll 119 # 6-24
Otro espécimen de la cocina italiana, esta vez en la localidad de Usaquén como parte del emporio restaurantero de Leo Katz. Es fácil reconocer un restaurante de Leo Katz; son restaurantes de una infraestructura muy grande con mucha capacidad, menús con muchísimos platos y rangos de precios bastante amplios. La reserva se hizo en el jardín, que es un nuevo salón inmenso de techos altísimos y mucha luz. Por el ambiente, podemos decir que es bastante agradable pues se siente la amplitud y agradan las enredaderas que se encuentran plantadas en una de las paredes del salón. Quiero destacar el excelente nivel de tención que nos brindó el mesero, uno de los mejores que hemos vistos en mucho tiempo. También quiero destacar el pan de cortesía que es un pan tipo pita inflado en horno de leña, acompañado con bolitas de mozarella en aceite verde de oliva; un detalle que muchos restaurantes de nivel deberían aprender. Como entrada ordenamos una sopa minestrone con pesto, la cual estaba bien para superar el clima invernal bogotano. Una sopa suave con verduras, papa y unos granos de arroz. Su sabor bueno, mas no espectacular. De fuertes ordenamos unos rigatones con chorizo picante, berenjena y salsa napolitana y unos raviolis de queso de cabra y naranja. En ambos casos, la pasta se encontraba al dente; los sabores agradables, en especial el contraste con la cáscara de naranja de los raviolis, la porción de un buen tamaño. En términos generales no decepciona Amarti, pero no podemos decir que son sabores únicos que nos hagan vibrar y bailar encima de la mesa. La cuenta puede ser decente o no, dependiendo de la elección. una visita más reciente me confirma que el servicio se mantiene, los precios se engrandecen y la calidad de la comida es muy estándar, nada que emocione realmente en cuanto a sabores.
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